domingo, 5 de febrero de 2012

Pasión por el Quijote


No sólo amamos la obra de Cervantes, sino que además creemos en ella, aunque sea tanto como creer en lo increíble. Nuestra pasión por el Quijote se sustenta en el amor a la verdad, en la realidad íntima de los caballeros andantes y no en las apariencias vulgares.

Los demasiado simples toman lo dorado por el oro, y los demasiado inteligentes rechazan el oro a causa del dorado.

Debemos acercarnos al Quijote partiendo de la premisa de que, como sucede con todas las grandes obras, el Quijote está pensado para conducir e instruir a los buscadores de todos los tiempos sobre el misterio de la regeneración del hombre.

Parto pues de la convicción de que el pensamiento hermético y la tradición cabalística presiden esta obra. 

Proponemos ir a la médula, a la raíz. No se trata de hacer decir a las palabras lo que no dicen, pero tampoco nos convencen las interpretaciones de aquellos que ignoran ideales y valores propios de Cervantes y de su época. 

Recordemos que en dicha época de Cervantes el valor en la obra literaria no descansaba en la singularidad y el deseo de diferenciarse, sino en la Imitacion como regla de oro, que no consiste en hacer una copia vulgar, sino una Imitatio Sancta, por medio de la cual el autor imita ciertas expresiones o episodios de especial valor, a fin de que el lector, el suave lector, sepa en qué clave está cifrado un pasaje determinado o algunas palabras. 

Cervantes tiene el poder y la inteligencia de imitar y lo muestra con honor. Lo que nuestros contemporáneos consideran plagios en muchos casos son avisos para navegantes, guiños y complicidades.

La dialéctica entre las cosas como son (Edad de Hierro) y las cosas como deberían ser (Edad de Oro) ha dado lugar a una rebeldía muy española: la de ir contra la precariedad y el desamparo de la condición humana, y ha alimentado la espiritualidad de este pueblo hasta la irrupción de la modernidad, cuyos únicos dioses son el dinero y el consumismo. 

Hoy ha desaparecido casi por completo esta rebeldía, útil desde la perspectiva espiritual, la de aquellos hombres que se aliaron con Dios para rebelarse contra la Muerte.

2 comentarios:

  1. Mi querida Janeth, Cervantes recopiló el pensamiento de los clásicos,su obra es un homenaje a los caballeros de la Edad Media.El quijote se debate entre sus sueños y la realidad,donde lucha,por un mundo que no existe y es tomado como un loco.Su pensamiento va desgranando los valores humanos,la entraña de un "idealista"que está condenado a desistir de su "cuerda locura"y volver sin remedio a la realidad.
    Te dejo mi gratitud por tu excelente post y mi abrazo inmenso por tu cercanía y amistad.
    M.Jesús

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  2. En la edad media los Maestros espirituales eran símbolos de Coraje y Paz a la vez.



    Gracias.
    Un abrazo.

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